El análisis financiero de tu negocio, la clave para una gestión eficaz

El análisis financiero es una metodología que permite evaluar la salud financiera de una empresa, mediante el estudio e interpretación de los datos contables. Su objetivo es aplicar medidas correctivas, si los resultados no son favorables. Si tienes tu propio negocio, ¡esta información te interesará!

A la hora de poner en marcha un negocio, o con uno ya funcionando, suelen aparecer algunas dudas:

• ¿Estoy ganando o perdiendo dinero con mi negocio?
• ¿Cuánto necesito vender para no ganar ni perder?
• ¿Tiene sentido invertir en una campaña publicitaria?
• ¿En cuál conviene invertir?
• ¿Cuáles fueron las decisiones correctas? ¿Y las incorrectas?

Ante estos casos, lo primero que tienes que saber es que los hechos económicos se miden y se controlan con indicadores. Algunos indicadores se expresan en forma de índices, y ellos surgen de la división de una variable sobre otra.

Podemos decir que tanto el divisor como el dividendo en un índice pueden ser variables flujo o variables stock.

Ahora bien, lo que buscamos es hacer un análisis financiero de la empresa que proporcione las respuestas a los interrogantes que planteamos más arriba.

Este diagnóstico económico te permitirá conocer:

• la rentabilidad del negocio,
• los motivos de esa rentabilidad y
• el punto de equilibrio.

Para identificar los síntomas y elaborar un análisis correcto, es necesario hacer un estudio de la estructura económica.

Pero antes, definamos qué es el análisis financiero, cuál es su importancia y cuáles son los pasos para elaborar uno.

¡Es hora de tomar apuntes!

¿Qué es el análisis financiero?

El análisis financiero de una empresa se caracteriza por ser una método que permite evaluar y entender el contexto financiero actual de un negocio. En este tipo de análisis intervienen una serie de elementos, como por ejemplo:

• activos,
• costos,
• ingresos,
• y gastos.

Entonces, para entender qué es el análisis financiero es importante tener en cuenta que esta metodología también se refiere al conjunto de técnicas y procedimientos que conllevan al estudio e interpretación de los datos contables de una compañía.

El objetivo de un análisis financiero es elaborar un diagnóstico para aplicar las medidas correctivas si los resultados son negativos. En estos casos, son los agentes relacionados a la empresa quienes deben tomar decisiones a corto y mediano plazo para garantizar la estabilidad financiera.

Veamos quiénes son los agentes económicos y qué rol cumplen dentro del análisis financiero:

• Internos: en este grupo destacan los administradores, pues se encargan de mejorar la gestión, prevenir riesgos y desequilibrios dentro de la organización. En síntesis, su rol se identifica por planificar, gestionar y corregir.
• Externos: en este grupo figuran los clientes, proveedores, inversores y autoridades fiscales. Su función es conocer el estado actual financiero. Por ejemplo, un posible inversor debe tener conocimiento de este análisis para saber si un negocio es rentable y si vale la pena trabajar o no en él.

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¿Para qué sirve el análisis financiero en una empresa?

Si te estás preguntando, ¿para qué sirve el análisis financiero? ¡llegaste al apartado indicado! Es una herramienta clave para una gestión eficiente y permite saber si se utilizan de manera correcta los recursos de cualquier tipo de empresa, indistintamente de su actividad económica o tamaño.

Este instrumento gerencial y analítico sirve para conocer de qué manera opera una empresa y cuál es su situación económica presente y pasada. Por otro lado, facilita la identificación de sus puntos fuertes y débiles y proporciona datos del estado financiero para compararlos con otros negocios del mismo rubro.

Para realizar una comparación del rendimiento entre las empresas se toman en cuenta los siguientes índices:

• Índices de liquidez
• Índices de rentabilidad
• Índices de actividad y rotación
• Índices de endeudamiento
• Índices de cobertura
• Índices bursátiles

Diferencia entre un análisis financiero y un análisis económico de una empresa

Ahora que ya sabes para qué sirve esta herramienta, es momento de aprender cuál es la diferencia entre un análisis económico y uno financiero.

Por un lado, el análisis financiero tiene un enfoque cuantitativo que compara los gastos e ingresos de un negocio para determinar su rentabilidad y sostenibilidad en el tiempo. Tiene que ver con la liquidez, es decir, el dinero disponible que tiene una compañía en un momento preciso.

Mientras que, el análisis económico tiene un impacto más amplio en el negocio, pues se enfoca en la productividad y capacidad de utilizar los recursos para el cumplimiento de un proyecto en sí. Esto permite cuantificar el valor monetario de un bien determinado.

📘Leer más: ¿Cómo optimizar los recursos financieros de una empresa?

¿Cuál es la importancia del análisis financiero?

Al destacar la importancia del análisis financiero podemos mencionar los siguientes puntos:

• Es un instrumento que permite planificar proyecciones financieras partiendo de datos fiables.
• Facilita el proceso de crear un diagnóstico empresarial.
• Ayuda a la comprensión de la evolución temporal de la entidad que se analiza.
• Permite mantener un seguimiento y control exhaustivo de la empresa.
• Sirve de base para la toma de decisiones por parte de los agentes internos o externos.
• Posibilita analizar la viabilidad de una compañía para compararla con otras entidades o sectores.

Métodos de un análisis financiero

Existen 2 métodos o herramientas que te ayudarán a realizar un correcto control de gestión y análisis financiero dentro de tu negocio online o empresa:

Veamos en detalle cuáles son y cómo se llevan a cabo:

1. Análisis vertical

El análisis vertical, también llamado análisis estructural, es una técnica que permite conocer cuál es el peso porcentual de cada partida que corresponde a los estados financieros de una compañía en un período de tiempo determinado.

¿Cómo se realiza un análisis vertical?

La fórmula para realizar un análisis vertical es la siguiente:

AV =  Valor de cada partida / Total del grupo al que pertenece × 100

Ahora bien, este procedimiento puedes hacerlo en una hoja de cálculo. Lo primero que tienes que hacer es dividir cada partida a analizar entre el total del grupo al que pertenece. Después, se multiplica por 100.

Además, toma en cuenta que las partidas de los grupos patrimoniales van en el numerador (bienes, derechos y obligaciones que forman parte del patrimonio de una empresa). Y las masas patrimoniales van en el denominador (agrupación de elementos económicos y financieros homogéneos que tienen características similares).

2. Análisis horizontal

El análisis horizontal, también conocido como análisis dinámico, permite calcular la variación absoluta y relativa que han tenido las partidas del balance en dos períodos de tiempo consecutivos.

¿Cómo se realiza un análisis horizontal?

La fórmula para realizar un análisis horizontal es la siguiente:

Tasa de variación =  Valor en año 2 / Valor en año 1 -1 × 100

Para realizar este cálculo necesitarás el balance de situación o la cuenta de resultados de 2 años. Luego, con la ayuda de un software específico o una hoja de cálculo añade dos columnas en tu documento.

La primera columna es la diferencia entre el último año y el anterior. Mientras que la segunda es una tasa de variación.

📘Leer más: ¿Cómo optimizar los recursos financieros de una empresa?

Análisis de la estructura económica

Este análisis se realiza a través del estado de resultados conformado por algunas variables flujo que se caracterizan por ser la acumulación de “algo” (ventas, gastos) durante un período concreto (una campaña, un mes, un año).

Podemos dividir el estado de resultados en 2 partes:

• Contribución marginal
• Cuadro de gastos

Contribución marginal

La contribución marginal surge de restar los costos variables al monto de ventas sin IVA. Es muy importante porque calcula los gastos que se generan por las ventas, sin importar las acciones que se tomen a corto plazo.

En una tienda online se calcula de la siguiente manera:

Precio de venta sin IVA – CMV – IIBB – Cobranza – Comisiones = Contribución Marginal

Los costos variables que identificamos en una tienda online son:

• Costo de mercadería vendida (CMV): es lo que cuesta producir o comprar el bien. Si se produce, se tendrá en cuenta la mano de obra y los materiales.
• Ingresos Brutos (IIBB): cerca del 3% del precio sin IVA, en la mayoría de los casos.
• Cobranza: varía según la pasarela de pago, pero suele ser el 5% del precio de venta.
• Comisiones: ya sea para la plataforma o para los vendedores, se puede estimar un 3 % de comisiones.

Si esta cuenta se hace con un solo producto, se lo denomina Contribución Marginal Unitaria.

Cuadro de gastos

El cuadro de gastos es la suma de:

• gastos de comercialización,
• gastos de administración y
• gastos de logística.

La forma de detallar este cuadro dependerá de lo que quieras medir y controlar.

Por ejemplo, dentro de gastos de comercialización puedes incluir Instagram Ads y fotos de producto porque te sirve para medir la incidencia de una modificación en el resultado total.

En los gastos de administración hay que tener en cuenta el tiempo que le dedicaste a las tareas, más allá de que no se pague un sueldo.

Es conveniente que los gastos de logística estén en el cuadro de gastos porque, si los consideras variables, podría dificultar el cálculo de la contribución marginal.

Con esta información ya estás listo para calcular el punto de equilibrio, que muestra las ventas necesarias para no ganar ni perder.

Así es como se calcula:

Punto de equilibrio = Total del cuadro de gastos / Contribución marginal en %

Si lo quieres calcular en unidades, tienes que hacer lo siguiente:

Punto de equilibrio = Punto de equilibrio en pesos / Precio promedio de los productos

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Antes de empezar, ¿qué información necesitas para el análisis financiero de tu negocio online?

A continuación, te presentamos 3 factores que necesitarás para hacer que tu empresa opere de la mejor manera y ¡consigas aumentar las ventas de tu negocio!

1. Reseña de la empresa o negocio

Elabora un documento que recopile los siguientes datos:

• ¿Cuándo se creó la empresa?
• ¿A qué se dedica y cuál es su actividad económica?
• ¿Cuáles fueron las variaciones o fluctuaciones en temporadas altas y periodos de crisis?
• ¿Quiénes son sus principales competidores?
• ¿Cuál es el posicionamiento en el mercado de la empresa?
• ¿Quiénes son sus propietarios?
• ¿Cuáles fueron las estrategias para consolidar el negocio?

📘Leer más: ¿Qué es el presupuesto financiero y su función en tu empresa?

2. Estado financiero

Se compone de:

• Estado de la situación financiera.
• Estado de resultados.
• Flujo de fondos o efectivo.
• Estado de cambio del patrimonio.
• Consolidación del patrimonio.
• Balance.

3. Anexos gerenciales

Tiene que ver con:

• Ejecuciones presupuestales.
• Comparativos de gestión: proyecciones históricas vs. ejecuciones reales.
• Proyecciones estimadas para las próximas vigencias fiscales.

Paso a paso para realizar el análisis financiero en una empresa

En este punto del artículo, te contamos cómo hacer un análisis financiero partiendo de 3 conceptos básicos:

Rentabilidad

En este punto se evalúan los ingresos, costos, gastos y activos, entre otros elementos. El propósito es verificar tanto la calidad, evolución y proyección de la empresa, así como su composición; sin dejar a un lado su valor.

Liquidez

Tiene que ver con la capacidad que tiene la empresa para cumplir con sus obligaciones y deudas a corto plazo. Las variables que se observan en esta fase son: endeudamiento, periodo de maduración, rotación, activo circulante, etc.

Solvencia

En esta etapa se evalúa la capacidad de la compañía para cumplir sus objetivos a largo plazo, por ejemplo, la inversión y el pago de deudas. Además, también se analizan las fuentes de financiamiento, el patrimonio y pasivos a largo plazo.

Continuar con el análisis financiero

Para entender si un negocio es sostenible y está dando buenos resultados es necesario hacer un seguimiento detallado del presupuesto que se invierte en cada etapa.

No hay fórmulas secretas para su éxito, sino que se trata de probar y medir los resultados, de analizar qué funciona y qué no para ver dónde es necesario realizar ajustes y lograr un negocio cada vez más saludable.