Qué es la usabilidad y cómo medirla

En la actualidad, se escucha hablar mucho sobre temas como usabilidad, diseño centrado en el usuario, modelos mentales, etc. Pero, ¿qué significan estos conceptos? ¿Exactamente de qué tratan?

¿Qué es la usabilidad?

Lo primero y más importante es entender este concepto. Usabilidad se refiere a la facilidad con que las personas pueden utilizar una herramienta particular o cualquier objeto con el fin de alcanzar un objetivo concreto. En general, es un término que se usa mucho en el ámbito de las aplicaciones web y móviles, pero en realidad cualquier objeto “cotidiano” puede (o no) tener buena usabilidad.

Ahora que está claro este concepto, falta responder otro interrogante: ¿qué es el diseño centrado en el usuario? ¿Para qué nos sirve? El Diseño Centrado en el Usuario (o DCU, por sus siglas) implica diseñar teniendo en cuenta al usuario (es decir, las personas que utilizarán la herramienta), con sus necesidades, objetivos y características. El objetivo de esto es saber que nuestro diseño no es aislado, no solo tiene que ser bonito visualmente, sino que debe comprender las necesidades y objetivos que determinan nuestros usuarios.

Tests de usabilidad

Existen varios métodos para conocer la usabilidad de una herramienta o sistema. Uno de ellas es el test de usabilidad.

¿Qué es un test de usabilidad?

Es una prueba de observación con usuarios reales mientras utilizan y realizan tareas con una herramienta, sitio o aplicación. Es una manera de obtener información de los usuarios, analizando más lo que hacen que las opiniones que nos pueden dar sobre lo que hacen.

Los tests tienen como objetivo mejorar la usabilidad del producto, es decir, son útiles para analizar si el sitio cumple con los fines y tareas que se supone que debe hacer teniendo en cuenta al usuario que se espera que lo utilice.

Un test de usabilidad nos permitirá:

• Encontrar posibles problemas de usabilidad en el sitio.
• Evaluar posibles soluciones para los problemas encontrados.
• Entender y comparar a los competidores, futuros desarrollos de este mismo sitio o modificaciones al actual.

Algunos consejos a la hora de realizar tests de usabilidad

Definidos los beneficios de realizar tests de usabilidad, es hora de comenzar a delinear las tareas básicas para realizar uno.

Algunos puntos clave para tener en cuenta son los siguientes:

1. Definir los objetivos e intereses a evaluar.
   • Ejemplo: Se quiere analizar un sitio de venta de lanas. Uno de los objetivos puede ser: “Verificar si se pueden comprar varios artículos sin necesidad de iniciar sesión en la tienda”.
2. Identificar a potenciales usuarios de la aplicación o sitio web que se quiere evaluar y reclutarlos. Por lo general, es necesario contar como mínimo con 5 a 7 usuarios para realizar estas pruebas.
   • Ejemplo: Si se quiere analizar un sitio de venta de lanas, el usuario idóneo sería aquel que fabrica sweaters o teje en telares.
3. Determinar las tareas que se van a llevar a cabo durante el test. Una vez que estas tareas hayan sido seleccionadas, se debe armar un guión para tomar como referencia durante el testeo.
   • Ejemplo: Se quiere testear la compra de lanas. Un objetivo es entender cómo un usuario compra un kilo de lana en varios colores.
4. Preparación y realización del test.  El test se debe llevar a cabo en un ambiente tranquilo. Es importante contar con espacio para el usuario a ser testeado, la persona que guía al usuario durante el test con el guión y un observador que toma nota de todo lo que va sucediendo. Lo recomendable es guiar al usuario y no ayudarlo a realizar las tareas. Si se traba en algún punto, se lo puede invitar a repetir la consigna, o bien, continuar con nuestro guión.
5. Análisis de resultados y propuesta de soluciones.
   • Ejemplo: Se hizo el test a 7 usuarios. 6 de 7 no pudieron continuar con la compra de los artículos seleccionados debido a que el sitio no contaba con medios de pago. La recomendación en este caso sería verificar los medios de pago disponibles y, de ser posible, aplicarlos al sitio web.